El martes el Pelirrojo cumplió 7 años (madre mía como pasa el tiempo...) y os dejé una foto en instagram del día que nació y mañana haré lo propio con el Rubio que cumple 4 años. No me puedo creer lo mayores que están y como van cambiando... Si parece que fue ayer cuando nacieron y ya no queda nada de esos pequeños bebés.
El año pasado os contaba aquí que no soy mucho de complicarme la vida pero lo de este año se me ha ido completamente de las manos porque tenia que buscar alternativas a la celebración en el parque ya que el tiempo no acompaña nada y meter en un mismo sitio cerrado a niños de 6- 7 años con otros de 3 o 4 me parecía un poco locura.
Finalmente, el Pelirrojo se decidió por celebrarlo en un MacDonalds e invitar a unos cuantos amigos que se convirtieron en más de 20 niños al traer también a sus hermanos (nunca dejo a ningún hermano atrás) más los respectivos padres/madres. La verdad es que me sorprendió para bien porque los niños se lo pasaron fenomenal en el parque de juegos que tenia el local (y comprendí viéndolos jugar que hice bien no mezclando las edades... #pahabersematao más de uno) y como también les ponía la merienda y la tarta no tuvimos que hacer absolutamente nada. En los stories os deje una foto de todos los regalos que llegaron a casa ese día.
En la clase del Rubio, desde el primer cumpleaños se viene invitando a toda la clase y asisten los que pueden, pero se ve que hoy es viernes pre- feria y hay ganas de cachondeo y nos vamos a juntar 24 niños de nuevo más sus padres en un local infantil que hemos alquilado solo para nosotros y que está fenomenal.
Si sobrevivimos a todo esto, mañana toca celebración familiar con los abuelos y tíos en casa (menos mal que somos pocos) y ya se acabó porque los cumpleaños de mis hijos se celebran tanto que acaban pareciendo bodas gitanas.
Os iré contando por redes como lo llevamos y si sobrevivimos a esta locura!! y desde luego, ya estoy pensando como hacerlo el año que viene para que vuelva a ser conjunto y meterlo todo en el mismo día.
Besos!
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